El polen de gramíneas alcanza máximos de temporada y agrava las alergias

Las abundantes lluvias ayudan a las plantas a lograr una potente floración y los niveles polínicos superan los 50 granos por metro cúbico de aire

Las lluvias de los últimos días han favorecido la aparición de una "primavera esplendorosa", lo que incrementa los niveles de polen de algunas especies de plantas. Estos días son, entre otras, las gramíneas las que están alcanzando altos niveles polínicos, con concentraciones superiores a los 50 granos por metro cúbico de aire. También hay otras especies polinizando, como el querqus (encina o roble) que está en niveles altos, el plantago/ llantén, moderado, lo mismo que el rumex (acedera). La diferencia es que las gramíneas son las plantas más abundantes en Castilla y León en general y en Zamora en particular y por lo tanto las que han sensibilizado a más gente, más alérgicos que sufren los síntomas típicos de su alta concentración en el aire.

La alergóloga Susana Rebollo explica que la polinización de especies es algo que ocurre a lo largo de prácticamente todo el año. Por ejemplo, desde febrero está produciéndose la polinización de la arizónica, el ciprés, que es una de las especies que más acusan los habitantes de Zamora. También el plátano produce muchas alergias, aunque la especie predominante para dar este tipo de problemas son las gramíneas.

"Los picos máximos de polinización suelen darse entre el 15 de mayo y el 15 de junio, y estas lluvias que ha habido estos días favorecen que la primavera sea más esplendorosa. Porque claro, no deja de ser un riego al campo. Lo que se prevé es que haya polen de gramíneas. Ya no arizónica, que poliniza antes, pero sí otras plantas, como la parietaria, el rumex o el plátano. En Zamora la mayoría de los alérgicos al polen lo son a las gramíneas porque es la especie predominante en la zona. Si viviéramos en Andalucía probablemente fuera al olivo. Uno se hace alérgico a lo que tiene alrededor".

"Cuando hay una sospecha de que se es alérgico a algo es cuando hay que ir al alergólogo, para que nos diagnostique a lo que somos alérgicos y nos de las medidas de evitación. Primero hay que identificar el polen al que somos alérgicos, luego tomar las medidas y luego hacer un tratamiento. En un principio es sintomático, ahora, y luego prever si hay que hacer un tratamiento más específico, de inmunoterapia por ejemplo", indica la alergóloga.

"La alergia no se cura al cien por cien pero se puede mejorar mucho. Hay tratamientos sintomáticos muy buenos para controlar los síntomas y luego hay tratamientos específicos como son las inmunoterapias con los que se cura un poco. No se cura realmente, pero son tratamientos muy efectivos y logran que en próximas primaveras tu vayas teniendo cada vez menos síntomas en la exposición al polen. No se cura al cien por cien, porque yo todavía no he conocido a nadie que se haya curado de la alergia, pero se mejora mucho. Yo tengo pacientes por ejemplo que antes de vacunarse tenían asma y ahora el proceso les ha mejorado muchísimo. Ahora ya no necesitan inhaladores en primavera, son tratamientos específicos, no sintomáticos".

Los consejos que ofrece la Consejería de Sanidad pasan, en primer lugar, por conocer los tipos polínicos a los que es alérgico y su época de aparición. Hay que evitar entrar en contacto con ellos y para ello es interesante aprender a reconocer las plantas de los lugares que se frecuenten.

El servicio de información polínica mediante SMS, todos los jueves del año, y en el portal de salud de la Junta se pueden conocer los datos sobre las concentraciones de polen medidas en Zamora.

Los días de viento suave o moderado, secos y soleados y los momentos previos a las tormentas son los peores para los alérgicos por su mayor concentración de polen. Es conveniente para las personas afectadas que en las épocas de mayor polinización eviten realizar deportes y actividades de esfuerzo.

Mantener las ventanas de las habitaciones cerradas. Ventilar el domicilio preferentemente al mediodía, utilizar el aspirador en vez de barrer, limpiar el polvo con bayeta húmeda y no secar la ropa en el exterior son consejos útiles, así como viajar con las ventanillas del coche cerradas y poner filtros especiales en el sistema de aire acondicionado. Utilizar gafas de sol es un buen consejo, incluso usar mascarilla en caso necesario.

CARLOS GIL

Fuente: La Opinión de Zamora